ELEGIR DENTISTAA muchas personas les produce inquietud la elección del dentista al llegar a una nueva ciudad o ante un cambio por otro motivo. Tienen razón, el dentista presta un servicio, no vende ningún producto, ésto supone que no tengamos datos de la "calidad" del servicio, comparables con un modelo; el servicio no es tangible. Esa calidad implica muchos aspectos : instalaciones, horarios, experiencia del profesional, eficacia del personal auxiliar, delicadeza en el trato, financiación de los tratamientos ...etc.
La persona que tiene estas inquietudes normalmente se fija en algunos aspectos y sobre ellos, aplicando el sentido común, toma su decisión. La intención de este artículo es darles ideas y consideraciones para tomar su decisión. Por este motivo, y con objeto de no cansarle, lo presentaremos en forma de puntos breves.
-1. Un médico de familia, un pediatra u otro especialista médico que conocen la salud de los miembros de la familia durante muchos a?os, con cercanía, sabiendo el historial médico y las circunstancias personales son lo ideal. La relación médico-paciente adquiere todo su valor y el profesional sanitario no sólo cura sino que previene y mantiene en salud a sus pacientes. Esto es totalmente aplicable al dentista. Un dentista de familia que tenga continuidad de a?os es lo ideal para mantenerse en salud. Si usted tiene o encuentra un profesional, o un equipo, que le ofrezcan ésto no lo deje, perderá eficacia en los cambios. Este es un argumento para que elija bien desde el principio,
busque un servicio a largo plazo, con idea de continuidad.
-2. Pregunte en su entorno (amigos, familiares ) por sus dentistas. Consultas con a?os de funcionamiento que tienen prestigio, donde sus tratamientos duran después de a?os, con estabilidad de los profesionales y del personal auxiliar y donde se conoce al paciente personalmente.
-3. El dentista, en una gran ciudad, debe estar próximo. No puede suponer toda una tarde el desplazarse a la consulta. Hay muchos buenos profesionales. En los casos de ortodoncia (correctores) las visitas son mensuales, en problemas periodontales (piorrea) son varias al a?o, en cualquier caso una o dos visitas al a?o en los demás de la familia.
-4. Un buen profesional dedica tiempo e insistencia a los hábitos de higiene del paciente. De hecho quien cuida la boca es el paciente cuando a diario se cepilla y lleva una dieta correcta. El dentista arregla lo deteriorado. El trabajo del profesional educando, ense?ando con las auxiliares, revisando la dieta, es imprescindible. Si un diente esta cariado, se le arregla y el paciente continúa igual volverá a cariarlo al cabo de un tiempo. El modo de que dure muchos a?os es haciendo que no produzca nuevas caries. Esto es prevención y odontología bien hecha. El dentista no es un "empastador". Muchos pacientes no saben apreciarlo.
-5. Una historia clínica, una exploración intraoral y normalmente radiografías son necesarias para un buen diagnóstico. El 60 % de las caries se diagnostican con las Rx. La piorrea (enfermedad periodontal) se valora con las Rx. Con un diagnóstico detallado y bien hecho el profesional puede hacer un buen trabajo. Con un diagnóstico incompleto habrá errores ( caries, infecciones, pérdidas de hueso... no apreciadas). Un buen diagnóstico, como en cualquier rama de la medicina, es necesario para curar. Todos comprendemos la necesidad de una Rx de torax para valorar una tos persistente, pero no todos entienden la necesidad de Rx para buscar caries.
Un buen profesional dedica tiempo, estudio y pruebas en hacer un diagnóstico completo y detallado, y no es fácil. No conozco ningún médico que no cobre honorarios por un diagnóstico.
-6. Hay pacientes que acuden pidiendo un
"presupuesto para arreglarse la boca". El presupuesto supone primero un diagnóstico bien hecho ( me remito al punto anterior ). Otra cosa es que deseen información sobre cuanto vale una limpieza (tartrectomía), un empaste (obturación) o una determinada prótesis. Esa información se la puede proporcionar la auxiliar y no implica ningún acto médico. Un diagnóstico si es un acto médico.
-7. Hay personas que buscan la oferta o la ganga en la elección del dentista.
Reducir la elección sólo a lo económico es arriesgado.-8. Precio de los tratamientos.
Busque precios razonables. Si busca una consulta en la zona más cara de la ciudad probablemente su coste sea mayor. No siempre lo más caro es lo mejor.
-9. Una muela rota se puede arreglar con un empaste, con una funda (corona), con una incrustación...etc. Dentro de cada tratamiento hay otras categorías ( tipos de empastes, tipos de coronas ...). Dependiendo de lo que se haga los precios pueden ir de 1 a 10. En un mismo dentista puede gastarse en arreglar una pieza 40 o 400 €, ? de qué va a depender?. En gran medida del consejo del profesional que le recomiende lo que a su criterio es mejor en resultado y en coste. Por ello
es fundamental que el profesional le ofrezca confianza y explicaciones en los consejos que le da. Que le haga partícipe de porqué este tratamiento o aquél. Por supuesto nunca le recomiendo que hable de tratamientos con un comercial ( personal no sanitario que existe en ciertas consultas), intentará ofrecerle tratamientos más costosos sin tener criterio médico.
-10. Seguros dentales. El 90% de ellos son simples intermediarios entre el paciente y el profesional. Ellos negocian precios a la baja con los dentistas. No conozco ningún seguro que controle la calidad de los servicios, se limitan al precio.
La elección del dentista por compa?ías termina siendo una decisión esencialmente económica (ver punto 7).-11. Un consejo práctico, acuda a la clínica dental a una primera visita tranquila,
pida cita para una limpieza (tartrectomía) y valore si se ha encontrado a gusto, considere algunos de los puntos mencionados más arriba y decida.
-12 Publicidad dental. Siempre ha sido un tema controvertido. Los colegios profesionales (Médicos, dentistas, ...etc) tienen medidas muy restrictivas.
No está previsto que un profesional se haga publicidad dando un aspecto de negocio a su profesión.
Al irrumpir las empresas dentales han roto unilateralmente ese acuerdo, ahora se anuncian en televisión, en los centros comerciales etc. Si se deja llevar por la publicidad se enfrenta a profesionales (no sanitarios, de marketing) y estos lo mismo le venden un implante dental a usted que un frigorífico a un esquimal.